domingo, marzo 12, 2006

POR QUE NO TE HACES PARA ALLÁ AL MAS ALLÁ


Polo había tenido una vida sin cariño pero con muchas comodidades nunca supo lo que fue ganarse un centavo con el sudor de su frente y en contraste gastaba y exigía dinero como si fuera hijo de una familia clasemedierasemipudiente.
Siempre fue un tipo normal, nunca el más sobresaliente pero tampoco estuvo hundido; continuamente fue de medias tintas, un día de esos mediocres en que se creé que la vida no te va a dar nada conoció a una chica sencillacoquetasimpatica; aunque algo mentirosa como muchas, se llamaba Maria, cuasi estudiaba finanzas en la universidad local de su estado, tenia que viajar solo 30 minutos para llegar a su centro de entretenimiento, al platicarme de ella; confundía, parecería algunas veces que la amaba de tan solo verla, y otras tantas le era indiferente como un objeto. Le dije que me cautivaba su historia de novela barata que pasan en la tele –no mames no seas pendejo no es un historia de amor solo me la quiero coger-respondió- la cortejo segundo a segundo y al paso de unos días ya se la había llevado a su depa de soltero que tenia cerca del centro, al fin lograría su objetivo según el, después de tanta palabra adornada y la hechura de sueños con estructura inexistente, estuvo encima de ella como las nubes en el cielo negro, tenia tantas ganas de devorarla, que solo acaricio su calentura y contemplo su mirada sucia.
Se fue a su clase vespertina, la dejo llorando en la cama tapándose los ojos para no ver el mundo, mientras el planeaba un rencuentro con sus amigos de la infancia.
Pretendían caerle aun lugar solitario que les permitiera divertirse sanamente pero al final todos los planes se salieron de las manos, tomaron carretera con el alma prestada, Morfeo los envolvió en sus brazos, cotorrearon hasta morirse en la playa del deseo; se la pasaron a toda madre, no les duro mucho el gusto, al otro día estaban vacíos después de tomarse el mundo por un día, amanecieron solos; alguien les cobro cara la factura.
Polo perdió la memoria, no se acordaba de nada de que habían hecho con quien habían estado ni siquiera recordaba a Maria, poco a poco fue hilando sus acontecimientos y logro tejer la historia de su vida.
Sonó el teléfono, Polo no contestaba por que ya se le hacia tarde para su trabajo (era natural cada que en la noche anterior se ponía unos toques de esperanza) después de mil timbres y dado que paso cerca del aparato descolgó la bocina y con voz de muerto contesto: bueno, ¿quien es? soy Maria ( a esta perra vieja )¿ ya no te acuerdas de mi? ¿Claro como no, que tranza como te va? ¿Pues bien y a ti? Chido…… ¿Cuándo te veo? ¿Puedes pasar por mi mañana? Claro………………………………………………
Ahuevo ya se armo- dijo polo- poniéndose el cinturón y tomándose su café afuera de su casa.


Hola amor ¿A dónde vamos? Pues no se , a donde tu quieras, la noche cubría al bosque con su manto terso, se notaba claramente como fueron fundiéndose, no tenían a donde ir, en pleno camino las estrellas bajaban y se adherían al asfalto, pasaban a nuestro lado iluminando mi conciencia, el camino los llevo hacia un túnel que hacían los árboles, era un vereda solitaria; se detuvieron, el calor y las caricias aumentaron exponencialmente, los sillones fueron tan pequeños que impidieron que sus piernas volaran a su alrededor; estorbaban las palabras, el volante, la moral, el.
Durmieron cobijados por los demonios de la lluvia infernal que habían creado horas antes, a Polo lo despertaron la cantidad de llamadas perdidas provenientes de sus cuates que pretendían atascarse de alcohol,-el siempre definió al vino como un liquido perverso sacado desde el centro de la tierra para meterse en tus venos y explotarlas para llevarte a sus entrañas- no podía dejar a media carretera a su amiga por lo cual se sentía demasiado apenado con los amigos, ellos llenaban el pequeño vació que Maria y sus intoxicantes sabores le dejaban.

Arranco el auto con dirección otra vez desconocida, pasaron a la gasolinera a llenar el tanque de combustible y a cargarse de electrolitos perdidos, tenían el cuerpo seco.
Maria quiso visitar una laguna que nunca había conocido aunque estaba muy cerca de su subdesarrollado lugar de origen, bajaron por unas curvas no muy pronunciadas, todo estaba iluminado de un verde destellante frágil y excitante que hacia a Polo fundirse, lo hacia sentir en un nivel superior, al fin llegaron, no había muchos espectadores, se querían bañar, purificarse con agua caliente sin sal, el entorno se convirtió en un desierto, bebieron deseo, ansiedad, lujuria, con solo 2 minutos se recargaron, de repente sus cuerpos se encontraron en la misma trayectoria, recorrieron con movimientos uniformes y sincronizados el placer de una erección y la decepción de un abrazo.
El sol quemaba, incendiaba la carretera evaporando la sangre, tornaba el espectáculo en una foto rojoamarillonaranja que unía la tierra con el universo; las manos al volante, la vista perdida en nada, su cuerpo tranquilo deseándola vorazmente, ella disfrutaba de todo, poseía unos labios carnosos y jugosos con un brillo peculiar; exquisito, que le hacia ver deseada, complacida; satisfecha. Buscaron desesperadamente donde morirse en un abrazo, donde penetrarse las almas, el vestido rojo de ella caía por sus hombros respetando las parábolas de su contorno; ahí se reflejaban su vida sus fracaso y su triunfo.
Hundidos en la carne llego el hermano de Maria muy exaltado y violento, no busco a Polo para desmoronarlo ni reclamarle nada, sino que propino tremendo derechazo seguido de tres patadas a la cara y abdomen de María, Polo no supo como reaccionar se quedo ausente no mas de 2 segundos que al se le hicieron 100 horas, veía como muy despacio el puño explotaba en la boca de su amiga, explotando los tejidos en chorros efímeros de sangre pura, despertó y sacó un bat de la cajuela con el que le propino una serie brutal de golpes reventándole la espalda, haciéndosela polvo, iba a dar la estocada final, el golpe de gracia, ya se imaginaba demoliéndole las sienes; María lo detuvo; al final era su hermano.
Pasaron varios días sin tener noticias de ella, Polo no estaba ni molesto ni preocupado ni arrepentido; solo perdido en sus ideas sin llegar a un estado posible de definir, María lo llamó suplicándole la salvara, estaba harta de vivir de rodillas de tener cadenas que cortaban sus esperanzas, su derecho natural de vivir. El pensó en llevársela y después tratar de armar alguna relación o algo que los uniera; al final por tanto olerla, acariciarla, tenerla, ya se había acostumbrado.
Ya no quedaron de verse sino hasta que ella lo buscara, pasaron un par de semanas, estaba ya muy inquieto, inestable, algo le faltaba, una noche ya no pudo dormir de tener tatuada la imagen retumbando en su cabeza pidiendo la salvara, jamás había visto unos gestos tan conmovedores, impresionantes de sufrimiento, moría de ver esa cara desfigurada por el dolor, gritaba dormido, sudaba tanto por que no podían salir las lagrimas; no tenia, corrían y envolvían a María en la dimensión que estuviese.
La fue a buscar a su casa no importándole que casi mataba al hermano no la encontró en ningún lado, la busco y la confundió con las piedras; en todas las esquinas.
Caminando por la vida sin rumbo se topo con una amiga en común y le dijo que se había fugado con un wey de su escuela.