viernes, diciembre 15, 2006

SOLEDAD



Mis sabanas olían a tus pies
Las ventanas del hotel se amaban
Como las banalidades del amor
Tu sostén proyectaba tu ser en el camino
Lleno de brillo bajo l resplandor

La piel que percibí en tu olor
Cayó como brisa calida en mi sexo
Intimo acompañante del calor muerto
Sensación de complacerte en tu espectro

Unas luces bajaron y amartillaron
Corrompiendo la razón de ti
Que acaricie tu necesidad, de carne,
Corazón fundido; jugaste en mi arterias;
Lo comprendo.